Diréis que ya estáis hartos de oír hablar de las hermanas Kardashian- Jenner o de las Haldid y de su número de seguidores y de likes en Instagram, del tamaño de su culo o de su cadera y de si se han enrollado con éste o con el otro o se han jurado amor eterno con no sé qué músico que al final no les ha durado ni dos telediarios.
Entre tantas noticias de Instagramers, sus amoríos, sus cuerpos y sus poses parece que existe otro tema que empieza a tener relevancia: el de las solteras. Diría que éste es de mayor calado que la falda tubo de Kim Kardashian aunque se habla de nosotras en revistas frívolas, periódicos serios e incluso semanarios de prestigio a la par de las experiencias intrascendentes de estas it-girls del momento.
Será que tengo un blog sobre soltería y precariado y mi percepción es poco objetiva, pero no paran de enviarme artículos en las que nosotras, las mujeres solteras, somos las protagonistas absolutas y no para mostrar esa imagen estereotipada y cruel que desde hace poco se proyectaba de nosotras.
Me refiero a esa idea de mujeres solitarias y amargadas, a quien nadie ha querido, encerradas en casa y llorando mientras ven historias de amor que nunca vivirán, comiendo helado y con un aspecto físico horrible, cuya única aspiración es que venga un caballero a salvarles de esta pésima situación. En cambio, los hombres solteros siempre se le ha vendido como inteligentes y seductores que saben disfrutar de la vida y que cuando les apetece eligen a una tía espectacular para casarse (y así perpetuar el patriarcado).
La prueba de esta popularidad de la soltería está en que una de las actrices del momento, Dakota Johnson, protagonizó la película Mejor… solteras, que se basa en el bestseller de Liz Tuccillo, How to be single. También se ha publicado con éxito el libro Solterona de Kate Bolick, en el que destierra con humor esos tópicos descritos anteriormente. Creo que casi todos los medio se han hecho eco, de forma directa e indirecta, tanto del estreno como de la narración. Y The New York Magazine nos dedicó una portada.
Qué decir del vídeo viral en el que treintañeras chinas (llamadas mujeres sobrantes) se negaban a contraer matrimonio aunque la sociedad dijera que ya eran “mayores”, si ellas no habían encontrado a la persona o no era el momento o no entraba en sus planes porque solas podían llevar a cabo muchísimos más proyectos que les motivaban.
Pero esta popularidad no sólo la he palpado en los mass media sino también en el día a día. Este fin de semana, hablando con otras amigas solteras me decían que les había pasado varias veces que creían haber ligado con un tío (una en un bar y otra en una boda) y que después de perder toda la tarde o noche hablando y coqueteando al final les soltaba eso de que estaban casados o tenían pareja.
Mis amigas estaban mosqueadas porque si lo hubieran sabido antes no hubieran estado perdiendo el tiempo con alguien que no estaba disponible. Pero ya les dije que en el fondo esos tíos se morían de envidia, les parecían irresistiblemente atractivas y el hecho de no estar a su alcance y desprender encanto les movía a jugar con en ese “límite permitido”, ocultando su estado sentimental. Otra amiga me dijo que su sobrina había cumplido 12 años y en plena adolescencia todo el rato quería ir de compras y hacer planes con su tía soltera en lugar de hacerlo con otras tías con pareja. ¿Quién dijo que Bridget Jones era la soltera por antonomasia?
Yo creo que no está tan de moda ser soltera a partir de cierta edad. Noto que me he descolgado de mi grupo de amigas porque todas tienen pareja y algunas hijos y prefieren hacer planes entre ellos. Es como que ya no encajas ahí y lo entiendo pero hacer nuevos amigos es difícil, al menos para mí. Da igual a las actividades que te apuntes porque todo el mundo va a lo suyo o ya tiene pareja.
Pd: me gusta mucho tu blog, pones voz a lo que nos sucede a muchas solteras treinteañeras :)
Hola!
Creo que es la primera vez que escribo en un blog, aunque en tu twitter si te escribo. Pero he pensado que es un buen momento.
A ver...ahora está de moda esto o lo otro. Lo que me da rabia, es que las personas que están solteras (al menos desde mi experiencia, no voy a generalizar) estamos un estigmatizadas.
Desde mi experiencia, a mi la soltería me iba bien, era algo que no me apasionaba, pero no me molestaba. En el momento que todo tu entorno tiene pareja y tu no. A lo mejor porque no soy la persona más fácil para ir haciendo amigos por el mundo como churros, te planteas que ya llega la hora de estar con alguien. El problema es que tu no quieres pareja pero somatizas que si. Y a partir de aquí entras en un espiral de contradicciones y de boicots.
Ahora está de moda estar soltera. Es algo que ha existido siempre pero bien es cierto, que antes eras "La Tieta" de la canción de Serrat y ahora eres una persona autosuficiente que sola te vales. Algo impuesto otra vez por la sociedad y el entorno.
Pues mira, yo no sé que quiero en la vida. Si estoy soltera será porque no ha llegado mi momento, porque no quiero o ves a saber. Pero ni quiero aparecer como la "loca de los gatos" ni como una persona super guay que va de independiente. Soy quien soy por mi persona y no por mi estado civil.
PD: Me encanta tu blog jejeje dicho de paso
A muchos simplemente les gusta subirse el ego, entretenerse un rato sin llegar a nada "ilegal" . Luego son sus novias las que piensan que estamos desesperadas y se los queremos quitar. Ya se sabe que hay mucha lagarta suelta...
Hola Juanfra, en una relación de éxito confluyen muchos factores pero también hay que trabajarla y empeñarse en ello, la cosas sin esfuerzo no salen, tampoco en lo sentimental. Y sí el amor crece cuando es compartido pero también hay que saber con quién compartirlo y que sea alguien con el que haya un proyecto común, un feeling... aunque después tendrá que trabajarse igualmente.
Hay una frase que me encanta, es el amor es lo único que crece cuando es compartido, no me gusta estar de acuerdo con ese estereotipo de hombre, pero la verdad es que cada dia es mas común, por desgracia muchos de mis amigos y conocidos son de esa forma, yo creo que es mas difícil llevar una vida juntos que conquistar a todas las mujeres con una mirada, por que cuando dos personas comparten una vida, no hay secretos la una con la otra. En ocasiones uno puede pensar que es cuestión de suerte, pero la realidad es que es mas de voluntad, al menos eso creo... por que no todos tenemos la misma forma de amar, ni de pensar.